Pese a que en la actualidad los valores están en entredicho, aún es posible encontrar alguna actuación que nos conmueve, y muy especialmente si está protagonizada por una jugadora benjamín, que aprovechan el deporte para pasar un buen rato y lo más importante, para formarse como persona.
Como bien sabéis, el golf es un deporte en el que el honor y el juego limpio juegan un papel muy importante, siendo el propio jugador quien aplique correctamente las reglas de juego y normas de etiqueta. Cada uno es su propio árbitro.
Se intercambian las tarjetas con los compañeros de partido para comprobar y firmar al finalizar el partido. Una vez entregadas en el Área de recogida de tarjetas, el resultado pasa a ser oficial.
Comentado esto, paso a explicar lo ocurrido:
El pasado domingo en la Prueba del C.G. Costa Brava donde celebrábamos nuestra 10ª prueba y última antes de la Final, que además era Puntuable para el Grand Prix de la Federació Catalana de Golf y Vuelta valedera para los Campeonatos de España 2023 en las categorías Cadete, Infantil, Alevín y Benjamín.
La simpática y buena jugadora Benjamina Txell Alós, llegaba a la Casa Club no muy contenta por su juego, pero siempre pensando que su tarjeta podría ser buena para hacerse con la primera posición.
Txell era momentáneamente la primera clasificada entre las Benjaminas. Tal y como hace siempre después de entregar la tarjeta, repasaron junto a su padre los aciertos y fallos de cada hoyo, y vieron que el resultado no era correcto. Fue allí donde Txell y su padre se dieron cuenta que en el hoyo 5 donde había hecho 7 golpes, había anotado un 6. Con la decepción de cómo había terminado el hoyo, ni ella, ni su marcadora se dieron cuenta, entregando al finalizar una tarjeta con un golpe menos (46 en lugar de 47 golpes brutos) sin que hubiera posibilidad de rectificación.
En ese momento Txell vino a comunicarme desconsolada lo sucedido, para posteriormente auto descalificarse por el error cometido.
Solo me gustaría comentar que esta situación se ha dado en innumerables ocasiones, desde jugadores profesionales a jugadores amateurs de máximo nivel mundial y aunque nos disgusta mucho que Txell se haya auto descalificado, nos alegra mucho ver su honestidad, integridad y “fair play” y esperamos que sirva de ejemplo para el resto de jugadores, tanto niños como mayores.
Finalizo agradeciendo el acto de valentía a Txell Alós Martinez y animo a sus padres, a su profesor (Pol Bech), a su escuela de Golf (Emporda Golf Academy) y a su Club de Golf (Empordá Golf) a seguir del mismo modo con su formación en valores.
Cordialmente,
MANEL BELTRAN I SOLA
Presidente Associació Júnior & Baby Cup